Serigrafiar puede ser una labor apasionante, pero también un proceso lleno de desafíos. A veces, a pesar de tu mejor esfuerzo, el resultado final no es el esperado. ¿Te ha pasado que la impresión no queda nítida, los colores no se adhieren bien o el diseño se ve desigual? Estos son algunos ejemplos de los errores en la serigrafía que pueden afectar la calidad de tus productos. Detectarlos a tiempo es clave para mejorar tus técnicas y optimizar el uso de tus insumos.
Errores más comunes al serigrafiar
Cometer errores en la serigrafía es más común de lo que piensas. Sin embargo, entender los problemas frecuentes y cómo evitarlos te ayudará a obtener mejores resultados. A continuación, exploramos algunos de los errores más comunes y cómo solucionarlos:
Error en la selección de la malla serigráfica
Elegir la malla adecuada para tu proyecto es crucial. Un error común es no considerar la densidad o la viscosidad (grosor) de la tinta para seleccionar la malla correcta. Si optas por una malla demasiado cerrada (fina) para usar tintas viscosas es necesario tener aplicaciones repetitivas y con mucha presión quedando una aplicación con poco depósito y menos nítida. Por el contrario, una malla abierta (gruesa) puede hacer que la tinta tenga mejor depósito pero con acabado disperso (encharcado) y bajando los detalles del diseño.
Fallas en la preparación de la pantalla serigráfica (marco y malla tensada)
La tensión incorrecta de la malla en el marco es otro de los errores en la serigrafía que debes evitar. Una falta de tensión provocará problemas al estampar, te resultará líneas borrosas, manchas no deseadas y el descase de registro entre los colores del diseño. También se debe revisar al material del marco a tensar, si es de madera puede perder la estabilidad y resistencia de la tensión. Las recomendadas son las metálicas.
Asegúrate de revisar la tensión de la malla antes de empezar cada proyecto. Es mejor invertir un poco más de tiempo en este paso que arriesgarte a dañar una serie completa de prendas.
Mal uso de la emulsión (emulsionado y exposición)
La emulsión es la base para crear una matriz (stencil) de tu diseño. Si no está correctamente emulsionada y expuesta a la luz podrías enfrentarte a problemas como áreas donde no se revela la emulsión y por consecuencia la tinta no pasará correctamente y se obtendrán acabados de tinta poco definidos. Una exposición insuficiente hará que partes del stencil se desmoronen, mientras que una sobreexposición podría sellar las áreas que deberían quedar abiertas.
Errores al registrar (alinear) el diseño
El desalineado es uno de los errores más frustrantes, sobre todo cuando trabajas con múltiples colores. No registrar correctamente los colores de cada matriz nos resulta acabados donde los colores no coinciden y el diseño final se ve desordenado. La clave está en tener buenos marcos resistentes a la tensión y humedad, buena tensión de malla y usar registros de alineación precisos. Siempre se debe hacer pruebas de estampados en retazos de telas antes de iniciar en las prendas definitivas.
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Tinta mal homogenizada (mezclada) o mal curada
La preparación de la tinta es un paso fundamental. No homegenizarla bien afecta la definición, la viscosidad y consistencia de la tinta con acabados de regular a mala calidad del estampado.
Además, si no se cumple los parámetros de curado de la tinta (temperatura y tiempo) se pueden presentar problemas como desprendimiento o agrietamiento de la aplicación. Se puede utilizar un secador o un hormo de banda para serigrafía y medir la temperatura y tiempo para asegurar un curado óptimo.
¿Cómo evitar estos errores en la serigrafía?
Para evitar errores comunes en la serigrafía y obtener resultados de calidad, es fundamental prestar atención a varios aspectos clave del proceso:
- Selecciona las telas adecuadas: elige materiales con una textura uniforme y adecuada para el tipo de impresión que deseas realizar. Algunas telas pueden absorber demasiada tinta o generar inconsistencias en la impresión.
- Tener una seda o malla según la tinta a usar y el acabado deseado: una malla fina no deja buen depósito de tinta, pero da una buena definición. Una malla muy abierta deja demasiado depósito de tinta y con acabado regado y mala definición.
- Controla la exposición de la pantalla: un error frecuente es la sobreexposición o subexposición de la pantalla. Asegúrate de que el tiempo de exposición, tipo e intensidad de la lampara sean los correctos según el tipo de emulsión. Es importante revisar periódicamente el estado de la Luz, recordando que cada que se prende la vida útil y la intensidad de la misma van descendiendo.
- Haz lo posible por mantener la presión uniforme: durante la impresión, aplica una presión constante y uniforme con la rasqueta (squegee). Si la presión varía, la capa de tinta no será uniforme (tinta más gruesas o más delgadas).
- Asegura un secado correcto: las tintas textiles se deben termofijar (secado o curado) para evitar que se desprenda o se raje de la tela. Usa un secador o un horno de banda para serigrafía y respeta los tiempos indicados. Es importante revisar la calibración de los equipos y verificar que la escala de temperatura coincida con el calor que se requiere suministrar.
- Limpieza y mantenimiento de la pantalla: Limpia la pantalla correctamente después de cada uso. Los residuos de tinta o emulsión pueden obstruir las aberturas de las mallas dejando mal depósito del diseño en futuros estampados.
- Controla la cantidad de tinta: usar demasiada o muy poca tinta puede afectar la cobertura, nitidez, depósito y acabado del estampado. Ajusta la cantidad necesaria según el tipo, tamaño y tela que estés utilizando.
- Realiza pruebas previas: antes de producir en serie, realiza pruebas de aplicación para detectar posibles fallos. Esto te permitirá ajustar detalles no deseados y lograr un resultado óptimo.
- Capacitación constante: mantente actualizado con nuevas técnicas y mejores prácticas en serigrafía. La experiencia y el aprendizaje continuo son claves para evitar errores comunes y mejorar la calidad de tus trabajos. Solicita información técnica y asesoramiento de parámetros de uso a tu proveedor.
Evita los errores para lograr resultados profesionales
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